10 razones por las que viajar es la mejor forma de atreverse a aprender
Como si se en realidad se necesitasen diez razones… ¡Cada una de estas ya es suficiente por sí misma para reservar un vuelo! A contiinuación te ofrecemos una serie de razones por las cuales viajar es atreverse a aprender:
1. Viajar es descubrir
Humanos, somos un grupo diverso que habita alegremente prácticamente todos los rincones del mundo. Todos hemos crecido de manera diferente y hemos desarrollado distintas culturas y tradiciones, a nivel nacional y local. Recorrer el mundo y viajar a diferentes lugares implica descubrir nuevas y hermosas culturas, conocer antiguas creencias y escuchar historias fascinantes sobre la vida en diferentes entornos de las personas que viven allí.
2. Viajar es explorar
Sube hasta la cima de las montañas para admirar vistas espectaculares; pasea por sinuosas calles empedradas en busca de las mejores cafeterías ocultas, admira arquitecturas ornamentadas e iglesias antiguas. Cada uno de los lugares a los que viajas es único y te está esperando para que lo descubras, lo que significa que también te esperan un montón de experiencias memorables.
3. Viajar es sentir
Durante tus viajes, puede que en algunos momentos sientas emoción, ansiedad, entusiasmo, nostalgia o alegría. Con esos altibajos, viajar puede ser una verdadera montaña rusa emocional, en el mejor sentido posible. Pero, una vez que has viajado y has sentido esa sensación de asombro cuando recorres una ciudad o lugar por primera vez, querrás más.
4. Viajar es independencia
Viajar es una experiencia auténtica. Es aprender a volar del nido y a cuidar de nosotros mismos, darnos cuenta de que podemos resolver los problemas y sobrevivir sin ayuda, y aprender a creer que estamos preparados para cualquier obstáculo que la vida ponga ante nosotros. ¡Eres fuerte y puedes con ello!
5. Viajar es conectar
Crear conexiones con los compañeros de viaje, los compañeros de clase de estudios en el extranjero y las familias anfitrionas no sólo enriquece tu experiencia, sino que también amplía tu red de contactos. Esfuérzate por conectar con las personas que te rodean, ya que nunca se sabe las oportunidades que podrían surgir. (Además, si haces diez buenos amigos de otras partes del mundo, ¡tendrás diez razones más para viajar en el futuro!).
6. Viajar es entender
Cuando has comido tapas con la gente local en Barcelona, has ayudado a proteger a las tortugas que anidan en las playas de Costa Rica o has pasado un mes viviendo en el ritmo acelerado de Nueva York, te conviertes en parte de un club especial de gente que ve el mundo de otra manera. Has vivido experiencias fuera de tu entorno conocido, y has visto que cada país y cada comunidad son únicos. Comprendes que las diferencias que hay entre nuestras vidas son los que nos hace interesantes, y que las risas, las historias y los valores que compartimos nos recuerdan que somos prácticamente iguales. Lo sabes.
7. Viajar es estudiar
Los estudios en el extranjero son fantásticos para viajar y, a la vez, desarrollarse a nivel educativo, sobre todo si se estudia un nuevo idioma. Los expertos coinciden en que una de las maneras más rápidas de llegar a dominar un idioma extranjero es vivir en el extranjero, ya que el aprendizaje se acelera con la inmersión lingüística.
8. Viajar es comunicarse
Estamos acostumbrados a conversar en nuestro idioma materno, por supuesto, pero viajar al extranjero significa aprender a comunicarse de verdad. Si hablas con la gente local todos los días, aprenderás el nuevo idioma mucho más rápidamente que si lo estudiaras en tu ciudad de origen. Y pronto te las arreglarás para comunicarte mediante gestos con las manos, expresiones faciales y coloquialismos locales, más allá del vocabulario que hayas estudiado.
9. Viajar es un reto
Puede ser intimidante si no viajas con frecuencia y te encuentras en una parte del mundo en la que nunca has estado, pero eso lo hace más gratificante. Ponte una meta, tal vez bailar el tango en Buenos Aires o caminar bajo los cerezos en flor en Tokio, y busca información para averiguar cómo hacerlo realidad. Es algo así como resolver problemas matemáticos, pero más emocionante y en el extranjero.
10. Viajar es aprender
Más allá de una simple oportunidad para estudiar y vivir experiencias interesantes, se ha demostrado que vivir en el extranjero hace que desarrollemos una conciencia de nosotros mismos más fuerte y saludable. A menudo, las experiencias que vivimos en nuestros viajes nos permiten encontrar respuestas para esas eternas preguntas: «¿Quién eres?» y «¿Qué quieres hacer con tu vida, sabes que viajar es atreverse a aprender?», y nos ayudan a modelar un futuro perfecto para nosotros.