Pre-Máster: Entrevista a Pablo Guillán
Pablo, 24 años. Cuando terminó su grado universitario en Química, decidió irse a la ciudad de Nueva York a prepararse para estudiar un máster en Estados Unidos con el programa Pre-Máster de EF. Después de su esfuerzo, fue aceptado en la Universidad de Boston, una de sus primeras opciones y hoy nos cuenta su experiencia.
¿Por qué querías estudiar un máster en el extranjero?
“La verdad que es algo que decidí el último año de carrera. Básicamente mi idea era irme fuera una temporada a aprender inglés; así que cuando fui a preguntar a EF, vi que la opción de hacer un Pre-Máster cuadraba con lo que buscaba. Consideré que era la mejor opción ya que me conectaría con universidades americanas; Aprender otra cultura y conocer gente nueva eran otras ventajas importantes ya que me ayudarían en un futuro en el mundo laboral. Al final, hoy en día en las empresas se trabaja en un ambiente multicultural; por lo que buscan gente con esas cualidades y que se sepan adaptar a diferentes entornos laborales.”
¿Dónde querías estudiarlo?
“Sabía que quería irme a los Estados Unidos, pero no tenía clara la universidad. Sabía que quería hacer o bien un Máster en Ciencia de Materiales, puesto que estudié Química en la universidad; o uno más enfocado al sector empresarial. Uno de mis primeras opciones era el Master in Engineering Management de la Universidad de California Irvine ya que combinaba ambos campos. Otro máster que también entraba en mi lista era el de Project Management de la Universidad de Boston, ya que es una universidad que ofrece un nivel de educación muy alto y que tiene una muy buena reputación a nivel mundial, siendo una de las top 50 de Estados Unidos y en la que finalmente me aceptaron. Si en un futuro volviese a los EEUU, me gustaría que fuese para hacer un MBA en una de las mejores Escuelas de Negocios, pero para eso aún queda mucho.”
¿Cómo se aplica para estudiar un master en el extranjero? ¿Te ayudaron?
“Para estudiar un master en el extranjero te piden muchísima documentación, rellenar muchos datos personales, etc. En primer lugar, quieren que les envíes tu CV/Resume y dos cartas de motivación. Por una parte, una personal statement, en el que tienes que explicar básicamente quién eres y qué valores te definen como persona.
Por otro lado, un statement of purpose, en el que tienes que hablar sobre tus metas a corto y largo plazo, tus objetivos, y cómo crees que ese máster te va a ayudar a conseguirlos. Además, debes realizar dos exámenes: el TOEFL, u otro examen que certifique un nivel mínimo de inglés y el GRE (si quieres hacer un máster más enfocado a ciencias, tecnología o ingeniería) o GMAT (más enfocado a escuelas de negocios).
De todas formas, si pretendéis hacer el Pre-Máster, no os agobiéis. En EF siempre hay alguien que te ayuda, te guía, te corrige las cartas de motivación y se asegura que toda la documentación necesaria está lista para ser enviada. Además, también teníamos ferias con diferentes universidades ya que EF tiene un network muy amplio, y esas ferias son oportunidades muy buenas para saber más sobre las universidades que te interesan y sobre los requisitos y perfiles que buscan.”
¿Qué nivel de inglés necesitabas para entrar?
“Depende de la universidad a la que apliques y del examen que hagas. Por ejemplo, si te examinas del TOEFL, las universidades normalmente te piden una puntuación mínima de 100 sobre 120, aunque algunas más top suelen exigir 110 sobre 120. Sin embargo, hay escuelas que piden un nivel más bajo; de 70 sobre 120. Todo va en función de la competitividad de la universidad a la que estés enviando la solicitud.”
Tres mejores cosas de la experiencia de estudiar el Pre-Máster.
“Si tuviese que quedarme con tres cosas, definitivamente, serían:
Poder vivir en otro país, en un ambiente multicultural como EF en el que estás en un campus con gente de todo el mundo. Esa experiencia te permite abrir mucho la mente, madurar, y pensar “out of the box”.
Hacer amistades con gente de todas las partes del mundo. Sin embargo, aunque después de EF no mantenga un contacto diario con todos ellos ya que muchos siguieron caminos diferentes, las experiencias vividas te enriquecen como persona y eso es algo que te queda para siempre.
Aprender un idioma nuevo. Poder estudiar, vivir, y practicar diariamente un idioma en un país de habla nativa es la mejor forma para interiorizarlo. Yo fui con un nivel de inglés B2 bajo, pero al final volví con un nivel C1 alto. Verte en un país totalmente diferente en el que no tienes fluidez con el idioma hace que te acabes exigiendo mucho a ti mismo día a día para desenvolverte.”
¿Consideras que hay una experiencia similar a la de estudiar el Pre-Máster con EF?
“Ni de lejos. Irte a otro país; sin conocer a nadie y en el que solo dependes de ti mismo es una experiencia increíble que recomiendo a todo el mundo. Te desarrollas como persona muy rápido y adquieres unos valores que al final te acaban siendo útiles en un futuro; tanto a nivel personal como académico o profesional.”
¿Recomendarías hacer este Pre-Máster?
“Sí. Sin duda es algo que recomiendo a todo el mundo. Tanto a nivel académico como a nivel personal.”