Mi hijo no sabe qué estudiar, ¿qué opciones hay?
La mayoría de las madres y padres, aunque siempre tienen la mejor intención del mundo, tienden a dar consejos como «tienes que elegir una carrera con salidas», «es una decisión muy importante que marcará tu futuro y que debes escoger con cabeza» … Y con ello sólo consiguen añadir más presión a los hijos y muchos acaban escogiendo una carrera que no les convence y que acaban dejando el primer año. Así que, si estás desesperado porque tu hijo no sabe qué estudiar, te explicamos qué puedes hacer y qué otras opciones existen, para que le puedas aconsejar de la mejor forma posible.
Es verdad que, aunque estudies una carrera, la vida puede dar mil giros; pero también es cierto que se trata de una decisión que puede acompañarlos en sus vidas. Por esa razón, escoger qué hacer a continuación es una decisión muy difícil.
Escúchale
Escucha sus preocupaciones antes de empezar a aconsejarle. Conoce sus intereses, sus capacidades y su visión de futuro. Todo el mundo tiene un potencial que se tiene despertar e incentivar. Es posible que tenga claro dónde quiere llegar, pero no sepa cómo llegar hasta ahí.
Sin embargo, también existe la posibilidad de que no tenga ni idea de qué hacer, que no haya encontrado su vocación y su potencial. Lo más importante en estos casos es transmitirle vuestro apoyo y tranquilidad. Aceptar que entrar en la universidad justo después de bachillerato no es la única opción y, posiblemente, para alguien que se siente tan perdido, tampoco es la mejor.
Entonces… ¿Qué otras opciones existen?
Tu hijo no sabe qué estudiar; no es algo poco común. La vocación es algo que se encuentra descubriendo, experimentando… Aquí en España lo normal es empezar la universidad justo después de bachillerato, sin embargo, en otros países es muy común hacer un GAP YEAR, es decir, un año sabático. A los 18 años es muy difícil tener claro qué quieres hacer con el resto de tu vida, cuando a penas has tenido tiempo de vivir. Por esa razón, hacer un GAP YEAR no sólo le da más tiempo para averiguar quién es y cuál va a ser su siguiente paso en la vida; sino que también le aportará herramientas para ser autosuficiente.
Vivir en el extranjero una temporada le hará mucho más independiente, le ayudará a ver las cosas con perspectiva; madurará y aprenderá a gestionar emociones y situaciones de una forma más rápida que estando en su zona de confort. Aprenderá a desenvolverse solo y a desenvolverse con un idioma que no es el suyo, por lo que la fluidez que ganará en destino es incomparable a la que podría llegar a tener estudiando la lengua en su país natal.
¿Cómo beneficia un GAP YEAR al futuro laboral de mi hijo?
Más allá de los beneficios que aporta estudiar un año o semestre en el extranjero a nivel personal; hacer un GAP YEAR también aportará valor a su currículum. ¿Cómo? Vivimos en un mundo globalizado y las empresas cada vez más están buscando perfiles internacionales o candidatos que hayan vivido experiencias como esta. Además de volver bilingüe y no tener que preocuparse por el nivel de idioma que piden en las ofertas laborales, hará contactos internacionales. Sin duda, le aportará una ventaja competitiva frente a otros candidatos.
Con EF tienes la opción de personalizar tu curso y escoger asignaturas enfocadas a sectores especializados como el sector de negocios o el sector moda. De esa manera podrá aprender vocabulario específico sobre un campo.
Por último, tendrá la oportunidad de realizar unas prácticas en el extranjero que aportarán mucho valor a su currículum y le permitirá tener el primer contacto con el mundo laboral y probar qué le gusta. Este fue el caso de Roger, un joven que quería estudiar educación y que decidió hacer un GAP YEAR en Nueva Zelanda antes de empezar la universidad. En su experiencia descubrió que su verdadera pasión era el Marketing, por lo que considera que “no fue para nada un año perdido”, fue un año que le ayudó a encontrar qué quería hacer con su futuro. Y, como él, miles de estudiantes nos cuentan su experiencia (puedes leer sus historias en nuestro Instagram).
Como ves, hacer un GAP YEAR para encontrarse y aclararse es una muy buena opción si tu hijo no sabe qué estudiar y, además, le dará una ventaja en el mundo laboral.
Conclusión
Desde que somos pequeños nos han enseñado que el camino lógico a seguir en la vida es: colegio, bachillerato, hacer la selectividad, empezar una carrera o un ciclo, especializarte y, automáticamente, adentrarte en el mundo laboral. Hay personas que tienen sus pasiones o su vocación muy claras desde una temprana edad, sin embargo, no es así en la mayoría de los casos. Por esa razón, no debes desesperarte si tu hijo no sabe qué estudiar.
Todos deberíamos tener tiempo para conocernos, explorar, saber qué nos mueve y haber vivido lo suficiente para poder tomar ciertas decisiones con claridad. Equivocarse es parte del proceso, pero es mejor evitar dejar una carrera a medias porque no tuvimos tiempo suficiente para decidir.
Un GAP YEAR es la mejor opción para todas aquellas personas que deseen tomarse ese tiempo para conocerse; para aquellas personas que se sientan perdidas o desmotivadas; para aquellas personas que, simplemente, quieran aprender un nuevo idioma, volver bilingües y vivir una experiencia que les marcará de por vida.
Pero, por si este artículo no ha sido suficiente, hemos organizado una sesión online gratis de orientación académica junto a Anna Becerra, psicóloga y orientadora académica para ayudarle a descubrir qué es lo que realmente le apasiona o lo que necesita para encontrarlo.