Ana Milán viajó a Australia para aprender inglés.
La actriz española ha inspirado a muchas personas a salir de su zona de confort aventurándose con un nuevo reto en la otra punta del mundo. Ana Milán viajó a Australia para aprender inglés en EF Sídney y EF Brisbane.
En cuanto nos adentramos en la “vida adulta”, tendemos a acomodarnos en “lo seguro” y eso no sólo se convierte en una barrera personal, sino que causa apatía, falta de motivación y desgaste. Por culpa de la dependencia a esa zona de confort que sufrimos y el miedo a lo desconocido, dejamos pasar la oportunidad de enfrentarnos a nuevos retos y vivir experiencias que jamás hubiésemos pensado en vivir.
Nos ponemos excusas para no atrevernos y, en definitiva, para no vivir.
¡Pero eso no incluye a Ana Milán!
“Me reté a mi misma y me vencí.
He conseguido hacer algo que me ha conectado con cosas preciosas que tenía olvidadas.
Menuda experiencia, menudo viaje…
Aún no he vuelto y ya estoy deseando repetir.
No hay nada que te haga crecer más que atreverse a saltar desde donde te da vértigo. Voy a echar de menos estudiar mientras el sol me calienta la espalda y me tomo un “flat coffee with almond milk and two sugars” 😊
Gracias @efespana os elegiría una y mil veces💙”- Ana Milán.
Y aunque Ana fue contando su experiencia a través de su Instagram de una forma tan bonita, no nos pudimos resistir a hacerle unas preguntas:
¿Qué te hizo dar el paso para estudiar inglés?
“Era una deuda pendiente conmigo misma, hay pocas cosas que me den envidia en la vida, pero desde luego que las personas sean capaces de hablar varios idiomas me la da, ¡y mucha!”
¿Por qué irte a la otra punta del mundo?
“Me apetecía hacer algo que me diera vértigo, algo que a los 80 lo recordara como una aventura real.”
En la etapa adulta no es muy común “empezar de cero”, ya sea para aprender un idioma o emprender una nueva aventura en otro país. En tu caso, ambas cosas. ¿Qué le dirías a alguien que siente que “ya es mayor” para hacer lo que has hecho tú?
“Pues le diría que precisamente de eso se trata la juventud, no es un tema de años sino de dejar de arriesgarse para cumplir sueños o propósitos.”
¿Crees que has mejorado tu inglés? ¿Qué parte de la experiencia sientes que te ha ayudado más a mejorar el idioma?
“Mi inglés ha mejorado mucho, llegué sin hablar apenas y una de mis últimas conversaciones estaba bromeando en inglés con Joe (mi profe en Brisbane).”
Por redes pudimos ver que hiciste muchos amigos internacionales, ¿de qué nacionalidades eran?
“Japón, Corea, algún suizo y algún francés”.
Viviste en residencia EF en Sídney, ¿cómo fue la experiencia?
“¡Divertida!”
¿Crees que el no saber inglés te ha cerrado alguna puerta a lo largo de tu carrera?
“Pues supongo que sí, desde luego tener el mercado internacional complicado como mínimo.”
De aquí a Hollywood, ¿te atreverías a coger un papel en una peli o serie de habla inglesa?
“¡Aún no! Pero dame un añito….
Yo por ahora ya estoy mirando otro destino.”
Si tuvieses que quedarte sólo con tres cosas de tu experiencia, ¿cuáles serían?
“Volver a ser estudiante y serlo mejor de lo que fui, la sensación de triunfo ante haber cumplido una meta que se resistía y las risas con mis compañeros de clase”
Cuéntanos una anécdota de tu viaje (si es que sólo puedes quedarte con una jaja)
“Uno de los últimos días uno de mis compañeros descubrió que era una actriz conocida en España porque uno de los chicos franceses había visto una de mis series allí, ¡se lió y fue muy divertido ver sus caras!”
¿Repetirías otra experiencia con EF? Si es que sí, ¿dónde te gustaría ir esta vez?
“¡Sin duda! Y creo que este invierno buscaré un destino calentito para robar verano.”
Después de esta pequeña entrevista Ana Milán, nos despedimos citándola en su último post de Australia:
“Si me lo permitís hoy voy a brindar por mí. Porque he terminado las clases, porque hago chistes en inglés, porque aunque sigo con jet lag he cumplido un sueño, porque jamás olvidare este verano, porque es bonito querer regresar y ver a los míos, porque cuando te cuidas bien ningún sitio está lejos. Yo qué sé. Que chin chin.”
Brindamos por ti, Ana.