Cómo encontrar trabajo al salir de la universidad

Y ahora, ¿por dónde empiezo a buscar trabajo? Es la pregunta que se hacen la mayoría de los estudiantes al terminar la universidad. Aunque existen profesiones, como la de medicina o enfermería, en las que hay una continuación natural desde la carrera hasta el puesto laboral, pasando por el examen MIR o EIR, la realidad es que lo más habitual es tener la sensación de abismo entre los estudios y la ocupación.

La carrera profesional no se construye de un día para otro solo por tener una titulación. Pero tranquilo/a, porque a continuación detallamos las claves para que la creación de un currículum atractivo y la búsqueda de empleo te resulten de lo más sencillo. Allá vamos:

Primer paso: crea y/o adapta tu currículum.

Tanto si ya lo tienes, como si no, este es el momento de ponerte delante del ordenador y descubrirte como profesional. Deberás desprenderte de toda la información que resulte superflua y centrarte en los datos que realmente hagan tu perfil especial: habilidades, conocimientos, cursos, experiencias laborales concretas, etc. Fíjate siempre en que todo lo que incluyas esté relacionado, o pueda ser valorado positivamente, por el reclutador del puesto que buscas. Si no es así, es mejor no ponerlo. De este modo facilitarás el trabajo a la persona que lo lee y tendrás más posibilidades de que lo seleccione.

Segundo paso: eleva tu currículum.

Una vez completado este gran ejercicio de auto conocimiento, es el momento ideal para ocuparte de enriquecerlo. ¿Cómo? Puedes consultar diferentes ofertas de empleo para tu puesto ideal y observar qué requisitos solicitan. De esta manera, mientras estás desempleado, puedes plantearte distintas opciones para completar tu CV y cumplir con esas exigencias cuanto antes.

En este sentido, uno de los requisitos más demandados por las empresas en España son los conocimientos de idiomas, especialmente el inglés. El 90% de las empresas exige un nivel avanzado de inglés y el 40% valora altamente los conocimientos de inglés y de un tercer idioma.

Otra de las demandas al alza por parte de los reclutadores tiene que ver con las aptitudes, es decir, la capacidad de trabajo en equipo, de adaptarse a los cambios, de desenvolverse con naturalidad ante cualquier circunstancia, etc.

Con todo esto, una estancia en el extranjero puede ser la manera de elevar tu currículum y adquirir, de un plumazo (bueno, más bien en un año), un alto nivel de inglés y las habilidades necesarias para acceder a tu puesto soñado.

Esto, y mucho más, es lo que ofrece el Gap Year de EF: un programa de un año que asegura el aprendizaje de inglés o un tercer idioma para lograr el certificado MCER, avalado por el Marco Común Europeo de Referencia. EF cuenta con más de 50 ciudades entre las que elegir, con alojamiento incluido, para vivir la experiencia de tu vida y conseguir las soft skills y el nivel de idioma necesarios para aumentar tus posibilidades de encontrar un trabajo.

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