8 razones para viajar a Australia antes de cumplir los 30
Todos soñamos con viajar al Down Under durante un buen tiempo para explorar todo lo que Australia tiene para ofrecer. Pero también somos muy buenos encontrando excusas para no hacer ese viaje descomunal al otro lado del mundo. Después de todo, se necesita mucho dinero y tiempo, da igual lo ideales que sean las playas.
Aunque Australia ofrece cosas para todos los gustos, parece hecha a medida para la gente joven, independiente y aventurera. Así que aquí tienes las razones por las que deberías desempolvar tu pasaporte, agarrar tu mochila e irte a Australia ante de que lleguen los temibles 30 (y todas las responsabilidades que a menudo conllevan).
1. La veintena está hecha para la aventura
Es verdad, se deberían poder vivir aventuras a cualquier edad, pero en la veintena todo parece más emocionante y desenfadado. Y ¿cuál es el mejor lugar para descubrir a tu aventurero interior? Australia, sin duda alguna. La aventura está literalmente en el aire (o en el agua), no tienes más que preguntar a los buceadores, surfistas o paracaidistas.
2. Visados listos para personas de 18 a 30 años
En pocas palabras: tienes que ser menor de 30 años para recibir un visado de trabajo de vacaciones. Estos visados de duración de un año te permiten conseguir empleos flexibles en Australia —camarero, recolección de frutas y cuidado de niños, entre otros. Así podrás conocer gente nueva y ganar a la vez algo de dinero para poder recorrer este asombroso país.
3. Trabajo, trabajo, trabajo
Si no quieres viajar como el típico turista, tienes que ir antes de que tu vida consista solo en trabajar, trabajar, trabajar. Por eso la veintena es una época tan especial. Es mucho más fácil hacer un paréntesis en tu carrera antes que después, y hoy en día las empresas buscan gente con experiencia internacional a sus espaldas.
4. Las responsabilidades vienen a por ti
Es mucho más fácil y divertido viajar durante unos meses sin preocuparse de los días de vacaciones o del precio de atravesar el mundo en avión con la familia (los costes aumentan mucho, pregúntale a cualquier amigo con niños). Seguro, todo el mundo tiene algo que le frene, pero es mucho más difícil estar preocupado cuando estás en chanclas, luciendo el peinado más playero posible y haciendo barbacoas todos los días.
5. Ve más allá, vete más lejos
No te limites a Australia. Te será muy difícil querer irte de ese país, pero puedes usar tu año sabático para explorar la excitante Nueva Zelanda, los idílicos retiros costeros de Fiyi y las florecientes ciudades del sudeste asiático. Los vuelos son un poco largos, pero tienes que aprovechar la ocasión mientras estés allí.
6. Koalas
¿Por qué esperar para abrazar a un suave koala? En serio, ahora es el momento.
7. Ayuda a combatir el cambio climático
La Gran Barrera de Coral es una de las maravillas naturales del mundo, pero está desapareciendo a un ritmo alarmante debido al calentamiento global. Australia tiene un gran número de paisajes espectaculares que están amenazados, y es importante visitarlos de la manera más ecológica posible: haz que tu viaje sea más largo que corto (para evitar vuelos de largo recorrido en un año y aprovechar al máximo tu estancia), haz una donación a alguna organización benéfica que plante árboles para compensar las emisiones de tus vuelos, asegúrate de viajar de forma ética y…
8. …apúntate a gratificantes proyectos de voluntariado
En Australia hay gran variedad de oportunidades de voluntariado, perfectas para los jóvenes viajeros, como, por ejemplo, proyectos de protección de los arrecifes de coral, asistencia en festivales de música o voluntariado en granjas. Si das algo a la cultura que te acoge, no solo te sentirás genial, sino que también ganarás una experiencia inestimable para tu siguiente etapa profesional, mejorando tus conocimientos de idioma y tus habilidades prácticas.